MASAJE DE LA RUTA DEL AGUA

El agua es donde surge la vida y es un elemento imprescindible. Nosotros estamos constituidos al rededor del 70% de agua y deberíamos seguir el mismo ciclo natural que sigue el agua fuera de nuestro cuerpo (la lluvia, el pozo, el manantial, el arroyo, el río y el mar). Cuando el agua del cuerpo no circula bien, se estanca, se pudre, y es ahí cuando surge la enfermedad. Por tanto, para estar sanos, debemos activar nuestro ciclo del agua.

Este masaje restablece todo ese ciclo del agua, mueve el agua, y al moverla, también la calienta, pues somos agua caliente, somos agua a 36´5 ºC. Por eso, en general, no nos gusta el agua fría.

Dónde podemos encontrar el agua

El agua del pozo está en quietud, reservada entre las piedras. Es el agua más profunda y pura, ese agua que viene de la lluvia. Es el agua celeste, que se encuentra reservada y protegida. Ubicada en la cabeza. El cerebro está protegido por el cráneo y suspendido en el líquido cefalorraquídeo, que es el que va a desarrollar todo el sistema nervioso. Ese líquido tan precioso, es nuestra agua del pozo. Es un agua que se mueve muy poco, pero muy importante para la vida.

También es un agua que, como los pozos, sólo tiene unos orificios de salida, que son los sentidos (vista, olfato, tacto, oído y gusto). Es decir, que los sentidos serían los manantiales por donde emerge esa agua de pozo. Serían los orificios que nos comunican con el exterior. Nuestros sentidos serían la expresión del agua de pozo hacia afuera, los manantiales.

Después de los manantiales aparecen el arroyo y el río, los encontramos en el tórax. Es un agua protegida por las costillas, pero no está tan protegida como el cerebro. Tiene huesos, pero entre los huesos, entre vértebra y vértebra, ya tiene músculos. Ya no hay una protección tan dura, es más flexible, se mueve más, es un agua más fluida que se puede mover gracias a los músculos.

Y finalmente llegaríamos a un sitio donde ya no hay protección, que es el abdomen. Aquí estaría el mar, pues es el lugar donde más agua hay. Ya no está la protección de huesos que limiten el movimiento del agua, sino que en el abdomen el agua se puede mover libremente como el mar. Al final todas las aguas van al amar.

Este masaje, se trabaja boca arriba desde la cabeza hasta la cintura y boca abajo desde los hombros hasta la cintura. Tiene una duración aproximada de 50 minutos.

Indicaciones del masaje de la ruta del agua:

– Niños con parálisis cerebral.

– Falta de vitalidad.

– Estrés.

– Cansancio sin motivo aparente, con falta de humor y de vida, cuando todo lo ves negro y te instalas en la queja.

– Artrosis.

– Depresión.

-Con este masaje se restablece el funcionamiento natural del agua: desde lumbalgias hasta mucosidades o dolor de rodilla. Mueve toda esa humedad.

– Insomnio.

– Achaques distintos: dolor de cabeza, mala circulación, dolor de cuello, azúcar irregular, tensión alta…

Es un masaje muy eficaz. Lo que hay que hacer es mantenerse constante en él.

Está indicado para todo y para todos, niños, adultos, ancianos. No tiene contra indicaciones porque, si consideramos que somos agua, mientras en nuestro cuerpo circule bien ese agua, estaremos sanos.

Más información: masaje con Ventosas

Más información: masaje Facial Tonificante y Rejuvenecedor

Más información: Masajes